Transcripción del final del vídeo de la conferencia de Javier Milei «Libertarianismo vs socialismo», impartida en 2018-12-05 en el auditorio de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad Diego Portales, Chile, organizada por el Centro de Estudios Libertarios:
La igualdad que propone el liberalismo es la igualdad ante la ley. No hay nada más salvaje que intentar tratar de imponer la igualdad de resultados, porque todos somos naturalmente distintos y si quisiéramos que todos seamos iguales, primero, que sería un mundo inmundo: todos iguales, imagínense una cosa gris, uniforme, asquerosa, sin creatividad; pero además es profundamente salvaje porque, si la estatura promedio es 1,70, como no puedo hacer más altos a los que son petisos, tengo que cortar las piernas a los otros. Es decir, es una salvajada, es una bestialidad. Y, aparte, querer igualarnos lo que hace es violentar la división del trabajo, con lo cual violenta la cooperación social. No por nada aquellas sociedades que son más libres y abiertas al capitalismo son pacíficas, porque, como decía Bastiat: donde entra el comercio no entran las balas. De vuelta [al ejemplo anterior sobre la división del trabajo], yo puedo odiarlo a él [a mi cliente o a mi proveedor], pero lo necesito para estar mejor, no me queda otra que tratarlo bien, mi éxito radica en que él esté bien. Entonces eso es un sistema que promueve la paz.
En cambio, ¿cómo son los socialistas? Son todos resentidos. Creen que tienen derechos. Claro, ¡si total la cuenta la paga otro! «Yo tengo derecho a esto, tengo derecho a…». ¡No tenés derecho a nada!, porque alguien lo tiene que pagar. Solamente hay tres derechos: el derecho a la vida; el derecho a la propiedad, que es ser dueño del fruto de tu trabajo; y el derecho a la libertad. Cualquier otro derecho implica que alguien lo tiene que pagar, y si alguien lo tiene que pagar, no es que estamos yendo por la caridad, porque la caridad no es a punta de pistola: si tengo que meter al Estado en el medio, eso es un robo. Entonces [el socialimo] es un sistema que promueve la envidia, el odio, el resentimiento, el trato desigual frente la ley.
El mejor ejemplo tiene que ver con la redistribución de ingresos y los impuestos progresivos, es decir, cuanto ustedes más exitosos sean en el capitalismo, porque mejor trabajan por el bienestar de la sociedad y tienen mayores ganancias, ¿qué dicen los socialistas?: que hay que cobrarles más impuestos, pero impuestos que además son más grandes proporcionalmente, es decir, implica un trato desigual frente a la ley. No solo es un robo, sino que además implica tratar de manera distinta a la gente frente a la ley. Es una locura, es decir, ¡alguien está a favor de tratar desigualmente frente a la ley a la gente! ¡Pero es un disparate! Nadie en su sano juicio puede sostener esto si entendiera verdaderamente los valores morales del socialismo.
Entonces, muchachos, ustedes están frente a dos conjuntos de valores. ¿Ustedes qué tienen?:
Los valores del capitalismo; ¿los valores del capitalismo qué son?, sus instituciones: la propiedad privada; los mercados libres, o sea poco Estado; la competencia, la libre entrada y salida; la cooperación social; la división del trabajo; el ahorro; el esfuerzo; digamos, servir al prójimo con bienes de mejor calidad o mejor precio. O alternativamente, para pensarlo de otra manera: el respeto irrestricto por el proyecto de vida del prójimo. Eso es el capitalismo.
¿Y qué hay del otro lado?: la envidia, el odio, el resentimiento, el robo, el trato desigual frente a la ley, y sobre todo el asesinato, porque ¡ese sistema de mierda [el socialismo] solamente fue aplicado por la violencia y se cargó con la vida de más de cien millones de seres humanos!
Y como si todo esto fuera poco, ¡somos superiores estéticamente!