Los españoles del otro hemisferio

Extracto (con negritas añadidas) de la entrevista a Jon Juaristi por Luis Herrero Goldáraz en Libertad Digital, en 2022-03-12, a propósito del libro El canon español. El legado de la cultura española a la civilización, del que es coautor con Juan Ignacio Alonso:

La diferencia [entre Roma y el Imperio español] es que Roma no quiso hacer [la romanización] al comienzo. Es decir, la concepción de ciudadanía romana en todo el Imperio es muy tardía. Roma funcionaba por provincias. Y sus provincias eran como colonias, para entendernos. No tenían ese sentido español de los virreinatos. Por eso escuchar a los nacionalistas vascos decir que ellos son una colonia interior del Imperio español es una chorrada. En México se suele decir que la Conquista la hicieron los indios, la independencia los españoles y la revolución los mestizos. Y es verdad. Carlos Fuentes decía que los aztecas se quedaron turulatos al ver entrar por un desfiladero a trescientos extremeños llenos de mierda, chupando polvo como locos, y detrás de ellos a miles de tlaxcaltecas dispuestos a cortarles el gañote. La Conquista la hicieron los tlaxcaltecas, con Cortés al frente. Y hasta la emancipación siguió siendo igual. Los ejércitos realistas que lucharon contra los criollos independentistas en Perú tenían a 369 españoles en total. Pero sus 15 000 peruanos de base eran indios, o como mucho mestizos. El día 25 de julio de 1531, diez años después de la Conquista de México, un ejército español derrotó a los chichimecas en Querétaro. Pero no había ni un solo español de la península entre ellos. Eran miles de indios españoles, dirigidos por un par de capitanes, indios también, a quienes se les nombró caballeros de Santiago. Se les incorporó directamente a la nobleza militar de la península. Y a los tlaxcaltecas se les dio automáticamente un fuero. Se les concedió el fuero de Vizcaya. Es decir, que se convirtieron en los vascos de México. (Risas). Eran unos privilegiados, por supuesto. Es algo que duró hasta la independencia. Y además ellos estaban encantados. Decían que eran vizcaínos. (Risas). Los de Bilbao ya sabes que nacemos donde nos da la gana. En cualquier caso, ellos tenían su fuero indio. Y mandaron su diputado a las Cortes de Cádiz. Eran los españoles del otro hemisferio. No eran unos indios a los que había que asimilar. Eran españoles, con los mismos problemas sociales que tenían los españoles de aquí. Que si había que pagar a los señores y estas cosas.